En su intervención, Xi reconoció las dificultades económicas actuales:

"La economía china ahora se enfrenta a algunas nuevas condiciones, incluyendo desafíos de incertidumbres en el entorno externo y la presión de transformación de antiguos motores de crecimiento a nuevos", señaló el líder chino, haciendo énfasis en la necesidad de innovación y resiliencia frente a los cambios globales.

Sin embargo, el mandatario transmitió un mensaje de optimismo y motivación al pueblo chino:

"Pero podemos prevalecer con nuestro trabajo duro. Como siempre, crecemos en el viento y la lluvia, y nos hacemos más fuertes en los tiempos difíciles. Debemos estar seguros".

El discurso de Xi Jinping destacó valores como la unidad, la perseverancia y la adaptabilidad, marcando un llamado a superar los retos en conjunto.

Claves de su mensaje:

Reconocimiento de los desafíos globales y locales: Xi abordó la necesidad de adaptar la economía china a las nuevas realidades, enfatizando la transición hacia motores de crecimiento modernos.

Optimismo y fortaleza: Hizo un llamado a mantener la confianza en el potencial de la nación y el esfuerzo colectivo.

Resiliencia frente a las adversidades: Subrayó el carácter del pueblo chino que se fortalece "en el viento y la lluvia".

El mensaje del presidente Xi refuerza la narrativa de una China que busca prosperar en medio de desafíos, adaptándose a los cambios económicos y manteniendo su relevancia en la escena global.

El discurso fue transmitido ampliamente, dejando una clara directriz para el rumbo del país en el nuevo año.